Nada de habladurías, ni cursiladas, ni sonrisas, ni caricias.
Ya no las necesito, no las echo en falta: no son más que adornos, fugaces mentiras.
Quiero la verdad. Quiero acción. Elige ya.
¿Sabes? no tienes toda una vida para pensar; el tiempo vuela, los momentos caducan,
las palabras se esfuman. Y tú tan tranquilo, viendo cómo mueren tus latidos.
Perfecto, ya has decidido; te quedas a la espera.
Yo me quedo conmigo, mis sueños y mi destino.
Que, cariño mío, será mucho mejor que depender de tus delirios.
Ya no las necesito, no las echo en falta: no son más que adornos, fugaces mentiras.
Quiero la verdad. Quiero acción. Elige ya.
¿Sabes? no tienes toda una vida para pensar; el tiempo vuela, los momentos caducan,
las palabras se esfuman. Y tú tan tranquilo, viendo cómo mueren tus latidos.
Perfecto, ya has decidido; te quedas a la espera.
Yo me quedo conmigo, mis sueños y mi destino.
Que, cariño mío, será mucho mejor que depender de tus delirios.
6 comentarios:
A veces en el amor somos impacientes e impulsivo y no es malo, lo que pasa que en ocasiones es mejor ser un poco paciente, porque a veces hay personas que te quieren pero le cuesta darse cuenta de que eso es asi o simplemente tienen miedo y necesitan un tiempito para vencerlo..
oooooooooooooooh, joder, ni que lo hubiese escrito yo, porque es lo que ando pensando últimamente
sin duda, depender de una persona es lo peor que te puede pasar :)
Bonito blog tienes...
Con tu permiso iré pasando por aquí.
Te envío mi abrazo.
Dani..
Jopé; decirle adiós a los delirios ajenos es como arrancarte un lunar (técnicamente no es necesario, pero una vez fuera lo quieres de nuevo en ti:
Como si formara
parte de una
constelación más
grande)
Sencillamente verdadero y la cruda realidad.
Un beso.
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