6.3.12

pensando nos volvemos inestables

No quiero dormir, es más, ni aunque quisiera podría. 
Cierro los ojos y desfilan orgullosos los problemas. 
Y pienso, vaya si pienso.
Y pensando me vuelvo inestable. 
Las horas que duermo son horas muertas.
Es como... si se me acabase la vida ¿sabes? 
Todo es demasiado bonito como para perdérnoslo durmiendo.

2 comentarios:

Gabriela dijo...

el día deberia tener 48 horas... aunque aun a si me lo estaría perdiendo casi todo.

Zoe Row dijo...

Bueno, si tuvieramos tiempo para hacerlo todo, creo que al final el esforzarse para conseguir algo perdería un poquito kla gracia, no?
: )